Wimbledon: Krejcikova campeona
07/13/2024 02:16 PM
La checa Barbora Krejcikova y la italiana Jasmine Paolini se enfrentaron en la Pista Central, cada una buscando su primer título de Wimbledon. El partido fue un emocionante enfrentamiento de servicios, voleas y golpes desde la línea de fondo, lleno de tensión y drama mientras ambas jugadoras luchaban por tomar la delantera. Al final, fue Krejcikova quien salió victoriosa, ganando 6-2, 2-6, 6-4.
El primer set vio a Krejcikova sirviendo con precisión y potencia, entregando una serie de aces y golpes de derecha ganadores que dejaron a Paolini sin respuesta. Su juego desde la línea de fondo fue impecable, y rompió el servicio de Paolini varias veces para llevarse el set convincentemente por 6-2.
Sin embargo, el impulso cambió drásticamente en el segundo set. Paolini, energizada por el apoyo vocal del público, encontró su ritmo. Jugó con una agresividad renovada, sus golpes de revés cortados y con topspin pusieron a Krejcikova al límite. La confianza de Krejcikova vaciló, y los errores no forzados comenzaron a aparecer en su juego, permitiendo que Paolini se llevara el segundo set por 6-2.
A medida que el partido se encaminaba al decisivo tercer set, ambas jugadoras elevaron su nivel de juego, brindando a los espectadores una emocionante exhibición de tenis. El set fue una montaña rusa, con ambas jugadoras manteniendo su servicio y rompiéndolo de vuelta en un intercambio titánico. La cobertura de la cancha y las habilidades defensivas de Paolini estuvieron en plena exhibición, mientras Krejcikova contrarrestaba con sus potentes golpes de fondo y juego en la red. La tensión era palpable mientras intercambiaban juegos, cada punto una feroz batalla. Con 4-4, Krejcikova logró romper el servicio de Paolini con una serie de golpes ganadores precisos, y luego mantuvo la calma para servir y ganar el partido, llevándose el set final 6-4 y con ello, el campeonato.
El partido se caracterizó por un alto número de errores no forzados de ambas jugadoras, un testimonio de la presión e intensidad de la ocasión. Sin embargo, la capacidad de Krejcikova para reagruparse y jugar los puntos cruciales con mayor consistencia resultó decisiva. Su victoria añadió su nombre a la lista de diferentes campeonas de individuales femeninos en Wimbledon en las últimas ocho ediciones, una racha que destaca la profundidad e imprevisibilidad del tenis femenino. Este triunfo también marcó el segundo título de Grand Slam de Krejčíková, tras su éxito en el Abierto de Francia en 2021.
En las semifinales, Krejčíková había ofrecido una actuación impresionante para derrotar a la campeona de 2022 y cabeza de serie número 4, Elena Rybakina, en un duro partido a tres sets. El camino de Paolini hacia la final fue igualmente dramático, ya que superó a la no cabeza de serie Donna Vekic en un maratón que duró 2 horas y 51 minutos, estableciendo un récord para la semifinal femenina más larga en la historia de Wimbledon.
Después de su victoria, Krejčíková estaba visiblemente emocionada, su alegría e incredulidad resonaban con el público. “Todavía no puedo creerlo,” dijo, con la voz temblorosa de emoción. “Este es el mejor día de mi vida.” Paolini, a pesar de su decepción, fue amable en la derrota. Felicitó a Krejčíková y expresó su orgullo por sus propios logros, habiendo llegado a las finales tanto de Wimbledon como del Abierto de Francia en rápida sucesión.
Mientras Krejčíková levantaba su trofeo, el público estalló en aplausos, celebrando su ardua victoria. Los fanáticos también mostraron su aprecio por Paolini, quien recibió una cálida ovación al aceptar su trofeo de subcampeona. Fue la segunda aparición de Paolini en una final de Grand Slam, después de su recorrido hasta la final del Abierto de Francia, donde había caído ante Iga Swiatek.
Krejčíková luego se dirigió a las gradas, donde fue recibida por su familia y equipo. La envolvieron en un abrazo celebratorio, la culminación gozosa de años de arduo trabajo y dedicación. Esta victoria, grabada en los anales de la historia de Wimbledon, fue un testimonio de la resistencia y tenacidad de Krejčíková en el escenario más grande del tenis.